Visión budista de Júpiter en la casa sexta.

    Júpiter en la sexta casa hace fluir la capacidad de realizar diversas labores. El trabajo y la actividad son fuente de alegría. El trabajo es la creación de nuevas posibilidades. La flexibilidad en el empleo puede ser una de las influencias de esta colocación.

    Si el individuo no tiene una actitud acertada, es probable que desarrolle adicción al trabajo. Otro efecto negativo de este aspecto es la imposibilidad de concluir una labor o hacerla mal. Estas personas inician una nueva actividad sin terminar la anterior. La influencia de Júpiter produce fatiga cuando no se controla el entusiasmo.

   Un acercamiento sabio estimula la flexibilidad, el entusiasmo y la inspiración hacia cualquier trabajo. Las técnicas de meditación que ofrece el Budismo Mahayana crean circunstancias propicias en esta colocación. El karma yoga forma parte de ese repertorio. El objetivo es reflexionar inteligentemente en torno al empleo o trabajo.